Pincel: usaremos el pincel cuando queramos aplicar el esmalte en zonas controladas de la pieza, o tengamos menos cantidad del mismo para emplear otras técnicas.
Hay que tener en cuenta que según qué esmalte las marcas del pincel permanecerán testimoniando el proceso, hay que tenerlo en cuenta al aplicar.
Vertido : Usaremos esta técnica en piezas grandes cuando no tengamos suficiente esmalte para inmersiones o sea difícil de manipular, también cuando queramos provocar ciertos acabados mostrando la huella del vertido.
Inmersión: es una de las aplicaciones mejor acabadas y mas usada, teniendo suficiente esmalte para hacerlo se puede combinar con las otras según la forma de la pieza.
Aerógrafo: teniendo la tecnología a mano es una de las maneras más rápidas y “limpias” de aplicar el esmalte. Es ideal para cubiertas que necesitan poca capa. Cubrir piezas para la técnica bajo cubierta y que no se mueva el dibujo. O jugar con las particularidades del aerógrafo ( infinitas posibilidades)